¡Salvar vuestra casa del árbol!

Hola superpandas,
¿Seguisteis ayer las huellas de la masa? Se me puso la piel de gallina en cuanto vi hacia dónde se dirigían las manchas…¡a la habitación de Paul el Niño! Oh no, ¿le habrá pasado algo? pensé preocupada y armada con una sartén…no lo sabíais, ¿verdad?  Max y yo abrimos la puerta muuuy lentamente, nos asomamos y…adivinar a quién vimos: A Paul el Niño durmiendo con tortitas bajo el brazo:

¡Paul el Niño ha cambiado de sitio el puesto de tortitas! ¡Es que es tan mono y dulce el pequeño! ¡Fíjate que rápido han crecido sus poderes misteriosos! ¡Primero fueron sólo algunos dulces, luego lo del tembleque, después el puesto de tortitas y ahora arrastra todo el puesto junto a Troy!
¿Qué será lo siguiente? ¿Tirará la casa del árbol?
¿Casa del árbol? ¡Tengo que irme! Acabo de caer que todavía no me he comido el montón de tortitas que Troy me dio como recompensa. Espero que Paul no arranque de raíz mi árbol para llevarse mis tortitas.

¡Yo me las comí todas ayer para merendar! Por eso he tenido dolor de barriga toda la noche. Por cierto, para acabar tengo una muy buena noticia: Acaba de llegar a Panfu un delfín para darnos algunos consejos sobre Internet, claro. Y es que esta semana en Panfu trataremos el tema de la seguridad en Internet. Pero mañana ya sabréis algo mal, cuando hablemos con el delfín.´

Ojito al parche

 Ella y Max

Max, el cara tortita

January 29th, 2011

Jiji Pandas,
¿Queréis ver el ritual de belleza que sigue Max antes de irse a dormir? Algunos Pandas se colocan rodajas de pepino en los ojos, otros se untan una mascarilla de queso fresco. ¿Y qué hace nuestro Max? Él…
¡PARA! Vale díselo, pero no les enseñes la foto de hoy por la mañana, ¿vale?
¿Qué pasa? ¿Que no te gusta tu cara de tortita?
[  ]
Es broma. Hoy por la mañana cuando iba a hacer de canguro del puesto de tortitas, ¡me he tirado tanto tiempo riéndome a carcajada tendida! ¿Por qué? Comprobarlo vosotros mismos:

¿Cómo has pasado así la noche?
Bufff…¡Buena pregunta! Ni yo mismo lo sé. Todo empezó cuando me propuse resolver el misterio del puesto de tortitas. Yo, Max, el superreportero, quería demostrar a los Pandas que mi teoría del puesto de tortitas viviente era cierto, cuando el puesto empezara a caminar. Así que ayer por la noche me escapé de mi casa del árbol y me dirigí sigilosamente al patio del castillo. Troy ya dormía como un tronco, y yo me encontraba solo en la oscuridad. Lo único que se oía era el ruido de los murciélagos al volar. Hacía tanto frío, que veía el vaho de mi aliento al respirar…
¡Qué emocionante! ¿Y qué ocurrió?
Pues que me comí un par de tortitas calientes y me puse debajo del puesto a hacer de vigilante nocturno. Me debí de quedar dormido, no sé cómo, y me he despertado por los flashes de tu cámara de fotos.
Ahora ya no sabremos qué o quién se esconde detrás del puesto misterioso. ¿Queréis saber de verdad dónde se ha despertado hoy Max? (P.D: sólo tenéis que seguir las huellas de la masa )
Ojito al parche
Ella y Max